viernes, 17 de abril de 2015

El presente nos pertenece

Desde que nacemos y hasta una cierta edad, parte de nuestra vida está sometida a las normas y reglas que la sociedad, la familia y nuestros padres nos imponen con el fin de ayudarnos en nuestra formación como personas.

En la adolescencia, los estudios elegidos van dando forma a nuestro estilo de vida. Nuestros objetivos y metas empiezan a vislumbrarse.

No es hasta haber adquirido una cierta madurez personal cuando uno se siente dueño de sus propios actos y pensamientos.


Puede, como en mi caso, que la madurez nos haga sentir perdidos ante el acecho del futuro incierto. Sin embargo hemos de centrarnos en el presente, el será firme instructor de los pasos que demos mañana.

Por  ello, saboreemos a fondo cada segundo que vivamos